Video Box «Intimacy: the moments of social skin», comisariado por Yipei Lee

Video Box, programa especial sin ánimo de lucro impulsado por la Fundación Swab, da visibilidad a proyectos de videoarte originados en territorios con un tejido cultural marcado por la experimentación con este medio.

La edición pasada, comisariada por Yipei Lee, exploró la temática «Intimacy: the Momentos of Social Skin». A través de esta selección, se abordaron cuestiones como el género, las fuerzas intangibles de la geopolítica, el poder y la cultura que influyeron en el desarrollo social contemporáneo de Taiwán desde los años 90. Las obras desmontaron estructuras sociales e improntas históricas, abordando las relaciones entre la nación, la ciudad, la tribu y la familia. El cuerpo se presentó como un texto legible, con los seres humanos comparados con la piel y la textura adherida a la superficie de la sociedad, explorando ideologías culturales, prejuicios raciales, estatus sociales e identidades de grupo en la sociedad taiwanesa.

Ciwas Tahos (Anchi Lin)
Pswagi Temahahoi, 2022

Desde el primer día de la feria, Video Box se convirtió en un punto de encuentro para los amantes del videoarte. El programa fue, una edición más, un espacio dedicado a ofrecer una visión del videoarte experimental contemporáneo a través de proyecciones que exploraron las narrativas visuales más radicales y actuales, profundizando en la reflexión sobre la sociedad y sus conflictos.

El espacio, generado con materiales cedidos por la Fundación Miró, JVC, MNA Stands y BDU, destacó como un diseño muy alineado a la propuesta curatorial del programa, enfatizando el rol del videoarte como medio accesible y sostenible. De este modo, se ha possibilitzat la presencia de narrativas otros territorios a la feria sin la necesidad de transporte y otros procesos con un alto impacto ambiental.

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Hablamos con la comisaria, Yipei Lee

Quina relación ves entre los temas tratados a Video Box y la historia y realidad actual de la sociedad taiwanesa?


El tema principal, “Intimidad: los momentos de la piel social”, explora las relaciones sociales fragmentadas en la sociedad contemporánea desde múltiplos perspectivas, incluyendo la repetición psicológica, los paisajes urbanos, las conexiones indígenas y la natura, a través de diferentes generaciones. Refleja la complejidad de la sociedad taiwanesa, donde conviven prácticas rituales tradicionales con reflexiones críticas sobre el impacto de la tecnología. El cambiante tejido urbano pone de relieve la resiliencia de las comunidades humanas, mientras que las preocupaciones más que humanas lanzan luz sobre dos espectros contrastados: las interacciones entre humanos y animales en entornos de laboratorio y las narrativas femeninas subyacentes dentro de la cultura tribal.

Cómo seleccionaste las obras y los artistas que aparecen a Video Box, y qué hilos dan forma al discurso de la «Piel Social» que titula el programa?

La selección de obras y artistas refleja la complejidad de las transformaciones históricas, éticas y modernas experimentadas en los últimos 50 años. Los orígenes de los artistas alcanzan desde los años 70 hasta los 2000, ofreciendo ricas perspectivas generacionales que provocan discusiones locales espontáneas mientras resuenan internacionalmente. Sus obras revelan fuerzas intangibles e hilos políticos entrelazados con corrientes morales subyacentes, atravesando capas de comunidades tribales a la urbanización e incluso sociedades virtuales. La naturaleza poética de estos hilos interconexionados ilumina cuestiones sociales que preocupan no solo los artistas, sino también a la humanidad en su conjunto. A través de este enfoque, pretendo presentar una narrativa descentralizada que capte los núcleos evolutivos del cambio social.

Además, me acerco a la sociedad como una entidad subjetiva, o un «cuerpo», con el término «Piel Social» que sirve como metáfora de la funcionalidad. La dinámica de esta superficie social puede conducir o desplazar sus significados subyacentes. Retrata la profundidad de la pertenencia social y cultural a la vez que pone de relieve la fragilidad de la humanidad ante las corrientes democratizadoras actuales.

CHEN CHIEH-JEN
​A Field of Non-Field, 2017

Hay una producción de video y arte de los nuevos medios de comunicación de alta calidad en Taiwán. Cómo dirías que surgió este contexto y como lo ves evolucionar en el futuro?

Nacemos en una isla pequeña, pero con el crecimiento de la tecnología y la industria de los semiconductores, estos sectores han apoyado a centenares de miles de familias y se han convertido en parte integrante de nuestro ADN cultural. Esta fundación ha ido cuidando y configurando el desarrollo de nuevos medios y videoarte. A lo largo de los años, hemos sido profundamente influenciados por el manga japonés y la cultura de lo animo, que introdujo una atractiva narración visual. En la década de 1990, el arte interactivo y experimental fue ampliamente abrazado, impulsado por taiwaneses que habían estudiado en países occidentales. Hoy en día, a medida que las generaciones más jóvenes crecen inmersas en contenidos y creatividad orientados al digital en todo Asia, nuestro espectro educativo se ha expandido para incorporar narrativas digitales junto a la cultura y la identidad tradicionales.

Los artistas están explorando cada vez más la percepción y la encarnación de la tecnología. Con la accesibilidad de componentes y herramientas asequibles, muchos creadores están capacitados para experimentar e innovar. Más allá de la practicidad, también están guiados por una identidad estética diferente que refleja una mezcla única de influencias culturales a través del sonido, la luz y los elementos futuristas. Exploramos continuamente como el futuro del video y el arte de los nuevos medios de comunicación en Taiwán se encuentra en la fusión del patrimonio cultural tradicional con la tecnología de vanguardia, elaborando narrativas que resuenan tanto a nivel local como global. Este viaje en curso continuará redefiniendo como nos conectamos con el arte, la tecnología y entre nosotros.

Hsu Che-Yu
RABBIT 314, 2020

Qué crees que el videoarte puede contribuir a la reflexión sobre el mundo contemporáneo, tanto en cuanto a la forma como sus posibilidades de distribución?

Creo que el videoarte es un «artefacto especulativo», que tiene un potencial único para reflexionar sobre el mundo contemporáneo mediante la combinación de forma, contenido y métodos de distribución innovadores. En cuanto a la forma, traspasa los límites de la narración tradicional y la representación visual, permitiendo a los artistas y al público explorar temas complejos a través de experiencias dinámicas y multisensoriales en el contexto de una sociedad hipertextual.

Las imágenes fijas y en movimiento pueden interactuar con múltiplos medios, como el sonido, la luz, el movimiento y la interactividad, permitiéndolos reflejar la naturaleza fragmentada y poliédrica de la vida contemporánea. Esto hace que el videoarte sea especialmente eficaz al abordar temas como la identidad, la globalización y el cambio tecnológico.

En cuanto a las posibilidades de distribución, el videoarte prospera tanto en espacios físicos como digitales. Los formatos expositivos tradicionales, como por ejemplo espacios de arte, galerías y museos, proporcionan un contexto íntimo porque el público se comprometa profundamente. Mientras tanto, las plataformas digitales, incluidas las redes sociales, los servicios de streaming y las tecnologías inmersivas como la RV, ofrecen oportunidades sin precedentes para la accesibilidad y el alcance.

Estas plataformas permiten a los artistas conectar con el público global, fomentar las interacciones plurales en tiempo real y adaptar sus obras a contextos diversos, democratizando el acceso al arte y expandiendo su impacto social.

Desde mi observación, el videoarte a menudo sirve como un poderoso medio para la reflexión crítica, fomentando el diálogo sobre temas contemporáneos, a la vez que desafía y amplía las maneras en que nos encontramos y nos relacionamos con el arte en un mundo cada vez más interconexionado y digital.

Wu Chi-Tsung
PERSPECTIVE VIDEO, 2008

En una feria, que crees que aporta un programa de video como plataforma experimental y no comercial? Qué oportunidades crees que ofrece a artistas, profesionales y público en general?

Creo que es esencial tener una sección de narración no comercial que ofrezca puntos de vista alternativos mientras se abordan temas puntuales que fomenten una comprensión más profunda de las culturas extranjeras. Para los artistas, crea un espacio para mostrar su trabajo más allá de las restricciones tradicionales impulsadas por el mercado, fomentando la experimentación y la innovación. A SWAB, Video Box amplifica las voces de los profesionales y artistas culturales, fomentando conexiones con públicos que valoran el arte como una forma de expresión crítica y creativa.

Para los profesionales, incluidos los comisarios, los coleccionistas y los críticos, el programa de video ofrece oportunidades para descubrir posibles intersecciones entre los ámbitos académico, alternativo y comercial. Profundizan en las ideas y metodologías específicas que impulsan el videoarte contemporáneo, fomentando colaboraciones y abriendo vías para proyectos curatorials o institucionales que priorizan la experimentación sobre la comercialitzabilitat.

Para el público en general, el programa de video democratiza el acceso al arte presentando obras atractivas y motivadoras que a menudo abordan cuestiones sociales urgentes. Abren puertas más allá de las fronteras territoriales, permitiendo al público interactuar con diálogos sociales que ofrecen nuevas perspectivas sobre el mundo y desafían las formas convencionales de pensar.

En general, un programa de video actúa como un parque infantil flexible, enriqueciendo el entorno de feria a través de la unión de varios públicos y abrazando un ecosistema artístico inclusivo que valora el patrimonio cultural, el diálogo y la accesibilidad.

Con la colaboración de: